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La filtración de la build de Windows 11 ha quitado mucho protagonista al evento que Microsoft tenía preparado para el 24 de junio. Ya conocemos prácticamente todas las novedades de Windows 11, pero había algunas dudas que todavía quedaban en el aire, como el hecho de si íbamos a tener que pagar para actualizar a esta versión.
La build filtrada, incluso aunque un usuario se apunte al programa Insider desde ella, no permite realizar una activación si no se utiliza una clave. Se podria pensar que al no haber claves de Windows 11 todavía, no era posible activarlo para poder utilizar todas las funciones de personalización.
Nada más lejos de la realidad, los usuarios no han tardado en utilizar claves antiguas para activar Windows 11. Y de momento se ha confirmado que las claves de Windows 7, Windows 8.1 y Windows 10 funcionan perfectamente.
Esto tiene mucha lógica si tenemos en cuenta que Windows 11 es, básicamente, Windows 10 con algunos cambios a nivel de interfaz, ya que bajo el capó sigue siendo prácticamente idéntico al haberse pensado inicialmente como una actualización más del sistema operativo. Sin embargo, Microsoft parece haber elegido acertadamente seguir el camino de Apple o Android a la hora de ir cambiando de número a su sistema operativo para identificarlo con mayor facilidad.
Otra prueba de que Windows 11 sigue compartiendo base con Windows 10 es que los drivers para Windows 10 funcionan sin problema en Windows 11, como es el caso de los de las tarjetas gráficas.
Por tanto, las claves de los anteriores sistemas operativos funcionan perfectamente. Además, si tenemos un ordenador cuyo hardware ya está asociado a la clave de Windows y está activado a ojos de Microsoft, podremos actualizar a Windows 11 sin miedo a tener problemas de activación, ya que el sistema operativo seguirá activado.
Con esto, Microsoft se asegura evitar problemas como los que hubo para pasar de Windows 7 y 8.1 a Windows 10, donde muchos usuarios prefirieron quedarse con Windows 7. El sistema no tiene ya soporte, y todavía lo siguen usando cientos de millones de personas en todo el mundo, exponiéndolos a vulnerabilidades.
La actualización de Windows 7 y Windows 8.1 a Windows 10 fue gratis durante el primer año, y aunque Microsoft lo ocultaba, una instalación limpia de Windows 10 puede activarse con una clave de Windows 7, incluso al día de hoy. Por ello, es bastante improbable que vuelvan a hacer gala de que es gratis actualizar durante X tiempo.
Windows 11 es el futuro de Microsoft, ya que Windows 10 dejará de tener soporte oficial en octubre de 2025, más de 10 años después de su lanzamiento. La compañía quiere evitar dividir aún más a sus usuarios, pero no ha comenzado con buen pie. Por ejemplo, hacer clic central en un icono anclado a la barra de tareas en Windows 11 no abre nuevas ventanas. Tampoco es posible separarlas para que cada ventana que tengamos abierta tenga su propio icono con texto en la barra de tareas, lo cual va a enfadar a muchos usuarios, y veremos si no es necesario recurrir a elementos como Classic Shell. La compañía tiene medio año para arreglarlo.
Fuente: adslzone
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